Tras la consecución del Campeonato del Mundo por parte de la selección femenina de España hace unas semanas, todo se ha salido de madre. Un beso en la boca del presidente de la Federación por aquel entonces, Luis Rubiales, a Jennifer Hermoso, provocó un cataclismo que eclipsó la celebración del título conseguido y que ha traído un reguero de consecuencias.
La primera, la negativa de más de 80 futbolistas a ser convocadas con la selección. De las que conforman esta convocatoria de la nueva seleccionadora, Montse Tomé, tan solo Athenea del Castillo se mostró favorable al hecho de ir convocada con el combinado nacional.
La posición de las futbolistas que acuden a la convocatoria con España, lleva al CSD a mediar con la RFEF y conseguir algunas de las reivindicaciones de las jugadoras
La dimisión de Luis Rubiales por este caso, no es suficiente para la mayoría de las jugadoras, que han pedido el cese de toda la gente cercana al expresidente y que aún queda en la selección. Patri Guijarro y Mapi León abandonaron ayer la concentración, tras asegurar que no estaban cómodas allí aunque reconocieron que había habido unos avances en la buena dirección.
El presidente del CSD tuvo que hacer de mediador entre las futbolistas y la RFEF para llegar a un acuerdo que permita que España dispute hoy su partido de Nations League ante Suecia, con la mayoría de las jugadores convocadas por la sustituta de Jorge Vilda, que fue cesado tras los aplausos a Rubiales en la alocución del expresidente, en la que dijo que no iba a dimitir.
Alfredo Duro y Roberto Morales dejan caer, que hay otro tipo de cuestiones más personales que influyen en el cese de Jorge Vilda
Ayer en El Chiringuito, Alfredo Duro comentó algo que no gustó a Pedrerol: “A Vilda lo fulminan porque prohíbe las visitas de las veteranas a las novatas en el hotel a altas horas de la madrugada”, afirmó. Eso no le gustó al presentador, que le cortó rápidamente.
Por su parte, Roberto Morales dijo: “Se le echa por otras cosas de las que no quiere que hablemos Josep, pero deja caer Alfredo”.
“La pena de este país es que no se puede hablar. Y sabemos tantas cosas que no se pueden decir….”, afirmó el periodista. El tema tiene cuerda para rato.