El Real Madrid sigue muy firme en su postura. Es el único club que no permite que las cámaras y los micrófonos de la televisión que retransmite los partidos, puedan acceder al interior de los vestuarios o a las charlas de Ancelotti con sus jugadores durante el encuentro.
Florentino Pérez lo tiene muy claro, LaLiga de Tebas está en franca decadencia y sólo hay que mirar la inversión en fichajes para ver que está a años luz de la Premier League.
Mientras, el presidente de LaLiga tiene ocurrencias que poco van a mejorar las audiencias y que apenas tendrán repercusión en las arcas de los equipos que disputan esta competición.
El Real Madrid no permite cámaras ni micrófonos en el vestuario ni en las charlas de Ancelotti en el campo
Según informa Onda Cero, el Real Madrid no va a permitir ninguna acción audiovisual en el interior del Santiago Bernabéu durante la previa ni el pospartido.
Esta acción se circunscribirá a la duración del encuentro. El club madridista vuelve a demostrar que no está dispuesto a aceptar las imposiciones de Tebas, y que esto no puede ser un circo, sino que hay que buscar soluciones reales a los problemas económicos de muchos de los equipos que conforman la competición.
Carlo Ancelotti secunda la opinión del club, para el italiano el vestuario es sagrado
❌ Este sábado en el Madrid-Getafe, Carlos Martínez o Álvaro Benito no podrán emitir en el Bernabéu casi hasta que empiece el partido.
— Relevo (@relevo) September 1, 2023
⛔ El Madrid 'veta' la emisión desde su estadio a la producción de LaLiga en el pre y el post.
✍ @sergiofernan5ezhttps://t.co/1V2gWEqtEn
Florentino Pérez no quiere cámaras ni micrófonos en el vestuario del Real Madrid, y esto lo secunda el entrenador italiano Carlo Ancelotti, que no quiere que se vulnere la intimidad del vestuario, con unas cámaras que lo único que buscan es alimentar el morbo pero no dar soluciones reales a los déficits estructurales de la competición. Tampoco permite que en las pausas por hidratación los micrófonos de la televisión graben la charla del míster a sus pupilos.
El Real Madrid se niega a cumplir la nueva normativa, e irá con todas las consecuencias hasta las últimas instancias para defender sus legítimos intereses.