El conjunto blanco tenía la labor de salir ante el Unión Berlín por la fase de grupos de la UEFA Champions League con la siguiente alineación: Kepa; Alaba, Nacho, Lucas Vázquez, Fran García; Valverde, Ceballos, Modric, Bellingham; Rodrygo y Joselu.
El primer tiempo
El conjunto blanco salió bastante dormido en la primera parte del partido. En el primer minuto del juego, un error de Luka Modric casi condenó al gol del local, lo que presagiaba un partido complicado para los blancos.
Posteriormente, el conjunto merengue empezó a tener el control del partido con oportunidades muy claras frente a portería. Dentro de estas, un larguero de Joselu tras un gran centro y una jugada magistral de Jude Bellingham casi terminaron en gol.
Pero el partido se vio considerablemente condicionado a partir de un penalti a favor del Real Madrid, el cual era bastante claro, pero que el croata del equipo, Luka Modric, terminó por fallar de manera sorpresiva. Tras eso, una contra de la Unión Berlín terminó en gol para concluir así la primera parte del encuentro.
El segundo tiempo
En la segunda parte, el conjunto blanco salió de una forma distinta con algunos cambios que hicieron una revolución total en el encuentro y que terminaron dando la vuelta al partido con dos excelentes centros y remates por parte de Joselu.
No obstante, la calma no llegó para el conjunto blanco, ya que, durante los últimos minutos del partido, el conjunto de la Unión Berlín terminó empatando el partido con un resultado de 2 a 2 de manera sorpresiva y con un auténtico golazo que fue inatajable para Kepa.
Pero sobre el final, y de forma dramática, Dani Ceballos logró terminar el partido dándole la ventaja a su equipo, finalizando con un resultado final de 3 a 2 a favor del Madrid, un resultado que era esperado, ya que el conjunto blanco quería vencer en este encuentro para llevarse el pleno de victorias y, de esta forma, el beneficio económico que esto conlleva. Esta victoria era más importante de lo que se esperaba.