El partido entre el Valencia y el Real Madrid ha terminado con un empate llenó de polémica, donde el Madrid se ha mostrado completamente molesto ante un nefasto trabajo por parte del árbitro, Gil Manzano.
Jude Bellingham fue uno de los jugadores más molestos, dirigiendo unas fuertes palabras a Manzano después de una acción que provocó un fuerte y completo estallido de la plantilla merengue.
El enojo de Jude Bellingham
“Es un puto gol, el balón está en el aire. ¿Qué carajos es esto?”, fueron las fuertes palabras de Bellingham hacia un Gil Manzano que se ha colocado en el ojo del huracán tras su pobre trabajo durante el encuentro en Mestalla, donde varios jugadores del Madrid fueron directo a protestar las decisiones del árbitro.
El Madrid, que buscaba desesperadamente el empate, logró concretar un gol en los últimos minutos del partido que finalmente fue invalidado por el árbitro, que pitó el final del encuentro antes de esta anotación y fue la gota que derramó el vaso para los merengues.
La protesta de Bellingham le hizo acreedor de una expulsión por parte de Manzano, y Carlo Ancelotti tuvo que entrometerse para calmar a su jugador y evitar mayores represalias, pero el descontento del Madrid ha sido demasiado notorio ante un arbitraje que consideran, cuanto menos, dudoso.
La frustración merengue
El Real Madrid ha sufrido demasiado en un partido que estuvo lleno de emociones. Ahora, el equipo debe tranquilizarse y enfocar toda su atención en los próximos encuentros, donde el Madrid sigue siendo favorito. La frustración del equipo es entendible, pero ahora mismo, el club debe calmarse antes de tomar cualquier acción que se tenga contemplada.
El club merengue ha sido presa de un nefasto arbitraje, pero el equipo sigue manteniendo su ventaja en La Liga contra el Girona, su principal perseguidor. La plantilla blanca debe poner toda su atención en terminar de buena forma la actual temporada, mostrándole al mundo que un mal partido no define el resto de una campaña.