Pese al paso del tiempo, Toni Kroos sigue siendo recordado con cariño por el madridismo. El alemán, quien militó 10 temporadas con el club, es toda una leyenda para la afición y el club. Habiendo provocado un gran problema tras su retiro, el Real Madrid finalmente ha logrado encontrar a un jugador que puede estar a la altura del germano.
Dani Ceballos, quien era una salida prácticamente segura, se mantendrá en el Real Madrid. Disputando más minutos esta temporada que la campaña pasada, la relevancia del utrerano ha aumentado. A base de esfuerzo y talento, el jugador se ha ganado el puesto en el equipo, teniendo habilidades similares a las que hacían destacar a Kroos.
La celebración de Ancelotti de su permanencia deja en claro que Ceballos seguirá teniendo minutos a lo largo de la temporada. El centrocampista, después de varios meses de incertidumbre, finalmente tiene un futuro más que claro por delante.
El sustituto perfecto
Disputando solo 892 minutos la temporada pasada, la situación de Ceballos era evidente. Habiendo perdido la confianza del equipo y del entrenador, su salida era inminente. No obstante, y a pesar del interés del Real Betis, las lesiones le dieron una segunda oportunidad.
Ahora, y tras la primera mitad de la temporada, el español ha logrado mostrar su valía nuevamente al club blanco. Con 28 años, Ceballos ha renacido como la estrella que necesitaba el Real Madrid para guiar el centro del campo.
Siendo imprescindible para el club, el futuro de Ceballos apunta a mantenerse por más temporadas como merengue. Al menos hasta que termine su contrato en 2027, Ceballos tendrá el objetivo de seguir los pasos de Kroos para ayudar al Real Madrid.
La recompensa de la segunda oportunidad
El caso de Ceballos demuestra que, pese a una mala temporada, un jugador todavía puede volver a rendir al máximo nivel. Los 912 minutos que ha disputado esta campaña solo son el comienzo de un jugador que puede ser importante para el club. Además, la experiencia con la que cuenta le permitirá apoyar a sus demás compañeros tal y como lo hacía Toni Kroos.