El Real Madrid vive un momento extraño en la portería. Con la lesión de Courtois en la misma semana de agosto en la que daba comienzo la competición liguera, que le mantendrá apartado del equipo hasta el mes de abril si todo sigue su curso normal, la llegada de Kepa Arrizabalaga procedente del Chelsea evitaba que el equipo blanco se quedase con tan solo un portero de nivel para defender el arco merengue durante toda la temporada.
Con la llegada del vasco se daba por seguro que sería él el encargado de ocupar el lugar que le correspondería en circunstancias normales al belga. Carlo Ancelotti se encargó de dejarlo claro tras los dos primeros partidos de la temporada en Bilbao y Almería, en lo que Lunin hizo un buen trabajo bajo los palos, pero no contaba con la confianza del italiano que en la tercera jornada le otorgó el papel de titular indiscutible a Kepa.
Ahora, tras una lesión en el abductor del vasco que permitió a Lunin lucirse en los cinco partidos que precedieron al del Real Betis, las cosas han cambiado y el ucraniano le va a poner las cosas difíciles a Carletto si pretende dejarlo en el banquillo como era su intención.
El futuro de Kepa y Lunin en el Real Madrid está en el aire. No se sabe aún la decisión definitiva que tomará el club
Pero más allá de la eventualidad, lo cierto es que no está nada claro el futuro de ninguno de los dos guardametas a día de hoy.
El Real Madrid está dudando si quedarse con Lunin a coste cero, o intentar hacerse con los servicios definitivamente de Kepa previo pago de un traspaso al Chelsea que no sería mayor a 15 millones de euros.
El portero del Valencia, Mamardashvili, ha sido ofrecido al Real Madrid. Tres equipos de la Premier siguen sus pasos
Mientras tanto, a río revuelto ganancia de pescadores pensarán los representantes de otros porteros que podrían dar el nivel para ser el suplente de Courtois en los años venideros. Eso pensó el de Mamardashvili, uno de los hombres más destacados de un Valencia que empezó con buen pie la temporada a pesar de no poder gastar nada en fichajes y tirar de jugadores de la cantera. El Tottenham, el Manchester United y el Newcastle están interesados en este guardameta de 23 años que tiene un valor de mercado de 30 millones de euros.
El futuro dirá cuál es la opción elegida por la dirección deportiva de un Real Madrid, que está pensando ya en qué posiciones es necesario un refuerzo de cara a la próxima temporada.