En el último partido de la gira americana, el Real Madrid perdió contra la Juventus de Turín por tres goles a uno. Fue un partido con un mal comienzo por parte del Real Madrid que encajó dos goles muy pronto fruto de la relajación inicial y de los desajustes defensivos.
Por los demás, volvió a adolecer de una falta de gol preocupante, se creó mucho pero solo se consiguió marcar un gol, tras un contraataque con un pase milimétrico de Kroos al espacio y la velocidad del jugador brasileño que definió de forma perfecta ante el portero Juventino.
El Real Madrid pierde su último partido de la gira, con un gran Vinicius que anotó un tanto
Vinicius volvió a jugar de delantero y fue el mejor jugador del Real Madrid. Estuvo muy participativo y generó mucho. Estuvo acompañado en la punta de ataque por un Joselu que falló dos ocasiones clarísimas, demostrando que le queda grande el traje de titular en el Real Madrid, y que si el equipo quiere aspirar a todos los títulos, tendrá que reforzarse en el ataque con un delantero que consiga hacer olvidar a Karim Benzema.
Fue un encuentro en parte, parecido al disputado contra el FC Barcelona, con un comienzo titubeante para continuar con un dominio claro del Real Madrid, que por merecimientos podría haber anotado más de un gol en la primera mitad. La Juve defendiendo con todo en su área y achicando balones la última media hora.
Vinicius estuvo todo el partido generando cerca del área rival, aunque fue insuficiente
Con Vinicius como principal estilete ofensivo, que fue una pesadilla para la zaga italiana. Pero insuficiente para que el Real Madrid pudiese empatar al menos el partido. Curiosamente cuando entraron los titulares en la segunda mitad fue cuando el conjunto blanco perdió el ritmo de presión y bajó bastante la intensidad.
Pero Vini seguía a lo suyo, generando constantemente y siendo una auténtica pesadilla para la defensa del equipo italiano, que en la segunda mitad lo paró de malas maneras. Hubo además un clarísimo penalti a Rodrygo, que el árbitro sacó fuera del área.
El equipo regresa a Madrid para preparar el primer encuentro de liga ante el Athletica club en San Mamés. Será la primera prueba de fuego para un Real Madrid que aspira a todo y espera a Mbappé.