Tchouaméni deja a todo el mundo boquiabierto: las redes arden al ver al francés en acción

Nos hemos quedado alucinando con este show del francés

Didac Aguirre
Periodista redactor
02 de Agosto de 2023
Tchouaméni deja a todo el mundo boquiabierto  las redes arden al ver al francés en acción
Tchouaméni deja a todo el mundo boquiabierto las redes arden al ver al francés en acción

Estaremos muchos de acuerdo en que cuando comenzamos a ver partidos de un tal Tchouaméni en el fútbol francés alucinamos con el poderío físico y técnico que tenía aquel chico que debutaba con el AS Mónaco. Desde entonces lo comenzamos a seguir y su rendimiento acompañado de un gran crecimiento hacía que fuese querido por muchos de los grandes equipos de la élite europea.

El verano pasado, el de 2022, el Real Madrid confirmaba la primera operación que hacía ver que el fútbol del tridente más mítico de toda su historia en el centro del campo, Luka Modric, Toni Kroos y Carlos Enrique Casemiro, estaba llegando a su fin. Con un sorprendente nivel de Modric y Kroos, ahí siguen. Pero el Madrid vio bien vender a Casemiro al Manchester United sabiendo que tenía bien cubierto el futuro con la llegada de este espectacular mediocentro francés.

Tras un gran comienzo de temporada pero que fue yendo a menos con su rendimiento tras la Copa Mundial de la FIFA, busca Tchouaméni recomponerse y ser importante en este Real Madrid. Pero, antes de eso, nos ha dejado petrificados con una versión que no conocíamos de él.

Un artista al piano

 

Y es que tras ver varios videos compartidos por sus compañeros y por las redes sociales oficiales del club, hemos visto que es todo un crack también al piano.

Ha dejado perplejos a sus compañeros cuando en mitad del hotel de concentración del Real Madrid en Orlando se ha puesto a tocar una pieza en el piano del descansillo.

Camavinga, a cuadros

 

Eduardo Camavinga ha sido uno de los jugadores que más se ha sorprendido con esta vertiente que no conocía de su compatriota y amigo. No ha podido parar de mirarlo constantemente, alucinando con su nivel en las teclas y quedándose perplejo con la calidad de su música. ¡¡Bravo, Tchouaméni!!

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