El Real Madrid cayó por 2-0 ante el Liverpool en Anfield, complicando su futuro en la Champions League. Tras el pitido final, Luka Modric, capitán del equipo, no dudó en valorar el partido y apuntar la clave del resultado.
“Quedan tres partidos de Champions y tenemos que mejorar”, declaró el croata. Modric aseguró que el primer tiempo fue correcto, pero no escondió su frustración con el penalti fallado por Mbappé en el minuto 61. “Esa acción podía cambiar el partido. No lo aprovechamos y con el segundo gol ya estaba casi perdido”, señaló.
Un mensaje claro, pero sin señalar culpables
Las palabras de Modric no buscaron culpar directamente a Mbappé. Sin embargo, subrayaron la importancia de aprovechar las oportunidades en partidos de este nivel. El penalti llegó en un momento crítico, con el equipo 1-0 abajo y buscando reaccionar tras el gol de Alexis Mac Allister en el minuto 52.
Mbappé, la gran estrella del equipo, ejecutó el penalti, pero Kelleher lo detuvo con una gran intervención. Minutos después, el Liverpool sentenció el partido con un gol de Cody Gakpo en el 76’, aprovechando una defensa desorganizada del Madrid en un balón parado.
La derrota fue aún más amarga por la lesión de Eduardo Camavinga. El francés, el mejor jugador blanco durante el primer tiempo, tuvo que abandonar el campo en el minuto 56. Esta baja supone un gran contratiempo para el Real Madrid, que necesita a sus piezas clave en plena forma para los próximos partidos.
Una fase de grupos complicada
Con esta derrota, el Real Madrid queda en la última posición que da acceso a los dieciseisavos de final de la nueva Champions League, ocupando el puesto 24. A pesar de todo, Modric mostró confianza en la capacidad del equipo para remontar. “Todavía hay posibilidad de entrar al Top 8 si ganamos lo que queda”, afirmó.
Los próximos partidos contra Atalanta, RB Salzburgo y Stade Brestois serán finales para los de Carlo Ancelotti. El equipo deberá mejorar tanto en ataque como en defensa para mantener vivo el sueño de la Champions.
Modric, como capitán, dejó claro que aún hay esperanza. Sin embargo, también envió un mensaje al equipo: en este torneo no se puede fallar en los momentos decisivos.