La inesperada marcha de Benzema al término de la temporada pasada, dejó un hueco enorme por cubrir en la delantera madridista. La llegada de Joselu se antoja insuficiente, y la afición reclama un delantero que marque los 30 goles que garantizaba Karim los últimos 5 años de su estancia en el Real Madrid.
Ancelotti tiene que resolver dos problemas tras la marcha de Benzema, ¿quién ocupa su puesto? Y ¿quién lanza los penaltis?
La solución de Ancelotti ha sido cambiar el sistema a un 1-4-4-2 con los centrocampistas en rombo, lo que le permite incrustar al flamante fichaje inglés, Jude Bellingham, en la mediapunta para aprovechar su llegada, su disparo y su buen juego aéreo. El británico viene de marcar 14 goles la temporada pasada en el Borussia Dortmund.
Pero ese cambio de sistema obliga a centrar la posición de Vinicius y eso a día de hoy no convence ni a los aficionados, ni a la prensa, y parece que tampoco al propio Vinicius que siempre que puede se deja caer en el costado izquierdo.
Pero si esa es la solución de Carletto para el hueco que deja Benzema en el ataque, hay otro problema que tiene que resolver. El francés era el encargado de tirar los penaltis, y en el partido contra el Barça hubo un jugador que se encargó de sustituirlo en esa suerte del fútbol, con poco éxito.
Tras el fallo de Vinicius, Ancelotti parece seguir confiando en él. Aunque la posible llegada de Mbappé podría cambiar el escenario
Cuando todo parecía indicar que Rodrygo, que ya lanzó varios el año pasado con eficacia o Luka Modric parecían los llamados a ocupar el vacío dejado por el Balón de Oro. Modric no se encontraba en el terreno de juego cuando tuvo lugar la pena máxima, sí Rodrygo, que cedió a su Vinicius la responsabilidad. El resultado, balón al larguero y oportunidad desaprovechada para igualar el marcador.
Al finalizar el encuentro, Ancelotti parece seguir confiando en el carioca, que antes del partido de ayer solo había lanzado dos penaltis en toda su carrera. Una la había fallado y la otra acabó en gol en un partido de la Selección brasileña contra Guinea.
Pobre bagaje para encargarle lanzar las penas máximas durante toda la temporada. Aunque la posible llegada de Mbappé, podría acabar pronto con el debate.