Uno de los jugadores cuya importancia en el Real Madrid ha crecido con el paso de los años es Eduardo Camavinga, quien a pesar de la lesión que sufrió antes del comienzo de la temporada, sigue siendo un pilar esencial para Carlo Ancelotti y para el centro del campo del equipo.
No obstante, el francés ha dado una inesperada sorpresa tras la visita que ha dado al Stade Rennes, equipo donde se formó y debutó en la élite antes de vestir la camiseta merengue, siendo una visita que Florentino Pérez no tuvo problemas en autorizar.
De regreso a sus orígenes
Con apenas 21 años de edad, Eduardo Camavinga ya es un gran centrocampista para el Real Madrid, con sus 2.824 minutos de juego disputados la temporada pasada siendo una muestra de la importancia y el progreso que ha ganado con el paso de las campañas.
Su visita al Stade Rennes muestra que, a pesar de formar parte del mejor equipo del mundo, el francés no se olvida de sus orígenes, manteniendo su humildad y, sobre todo, su felicidad al estar de regreso en un club y una cancha donde vivió varios grandes momentos.
Siendo esta su cuarta temporada vistiendo la camiseta merengue, este encuentro ha sido una gran manera para que Camavinga tenga más motivación respecto a su regreso a las canchas, teniendo todavía una lesión que ha evolucionado de buena manera.
El jugador que hace falta
Con la ola de lesiones que ha sufrido el Real Madrid desde el comienzo de la temporada, el equipo está a la espera del regreso de Eduardo Camavinga, con el francés estando cerca de poder volver a brillar dentro de los terrenos de juego y ayudar a mejorar el nivel del club.
Tras la visita al Stade Rennes, el francés seguirá concentrado en su proceso de recuperación mientras que el Real Madrid hace frente a los últimos partidos sin la presencia de su jugador, con el próximo encuentro siendo el derbi madrileño.