Camavinga se ha convertido en una pieza fundamental en el Real Madrid. Ya sea como revulsivo desde el banquillo, como titular en el pivote o como interior, o incluso siendo una solución de emergencia en el lateral zurdo, el francés siempre ha rendido y ha sido un ‘salvavidas’ para Ancelotti.
Sin embargo, esta temporada se lesionó antes de jugar siquiera un partido. Fue durante el día anterior a la final de la Supercopa de Europa ante la Atalanta, durante el entrenamiento, cuando sufrió un encontronazo con Tchouaméni cuando el partidillo se estaba acabando.
Desde entonces no ha tenido ni un minuto, pero parece que la espera llega a su fin. Aunque en el club no quieren correr ningún riesgo con su vuelta, han marcado en rojo en el calendario el derbi del Metropolitano del próximo 29 de septiembre. Eduardo quiere estar disponible para medirse al Atlético.
La prueba de fuego
El Real Madrid ya ha logrado sacar adelante compromisos complicados como la visita a Anoeta o el primer partido en Champions, incluso la Supercopa de Europa que lograron conquistar, pero parece que será el derbi ante el Atlético, el último equipo que logró derrotarlo la temporada pasada, el que supondrá la primera prueba de fuego.
Es por ello que Camavinga apura todas las opciones e incluso había intentado poder tener unos primeros minutos de rodaje en la jornada intersemanal ante el Alavés, pero eso parece mucho más complicado. Pero ante los rojiblancos sí que quiere estar disponible para Carletto.