El Real Madrid tiene varios dilemas que solucionar durante el mercado de verano. Uno de los más notorios está en la portería, especialmente porque la primera opción para el puesto de segundo portero todavía no ha confirmado su continuidad en la disciplina deportiva merengue: Lunin sigue sin responder acerca de su posible renovación.
Con el arquero ucraniano lleno de dudas acerca de alargar su estancia en el Real Madrid hasta verano de 2029, desde las oficinas de Valdebebas habrían activado un 'plan B' para suplir la baja del '13' europeo en caso de que decida no renovar o ser traspasado este mismo verano. Los informes de Juni Calafat apuntaron a Joan García.
🚨 Ancelotti aparta a Lunin, le dice a la cara lo de su futuro: "No es verdad...":https://t.co/1m3CBCZIPS
— Defensacentral.com (@defcentral) May 19, 2024
El joven portero del Espanyol ha completado una campaña histórica con la entidad catalana, siendo uno de los artífices de su ascenso a Primera División. El 'nuevo Courtois', sobrenombre que se ha ganado por su parecido por el '1' belga del Real Madrid, parece llamado a ocupar un puesto en el vestuario del Santiago Bernabéu siempre y cuando Lunin se marchara.
Otra vez cuesta arriba
Sin embargo, los cambios que se están dando en la estructura interna del Espanyol habrían puesto en peligro cualquier intento de negociación entre la entidad catalana y el Real Madrid por Joan García... más allá del hecho de que el guardameta español desea continuar militando en el club 'perico'.
La información publicada por el diario As señala que los nuevos inversores del Espanyol querrían mantener las partes esenciales del club, mientras que la actual dirigencia buscaba extraer la mayor cantidad de capital posible dando luz verde a una larga cadena de operaciones de salida. Las diferencias entre ambos inversores ha provocado que el fichaje de Joan García quede en un punto muerto.
Operación 'relámpago'
Pero a diferencia de lo que ocurre en los fichajes de Leny Yoro y Alphonso Davies, también 'atrapados' en circunstancias similares donde no es posible negociar un tránsfer con la directiva, el Real Madrid tiene una solución al fichaje de Joan García: la cláusula de rescisión de 25 millones de euros que figura en su contrato.
El portero ucraniano ha develado un detalle que hasta ahora era desconocidohttps://t.co/h8Ks0UQ4SG
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Así las cosas, los mandamases liderados por Florentino Pérez deberán hacer frente a esos 25 millones de euros si desean contar con Joan García para la próxima temporada... mientras siguen esperando a que Andriy Lunin tome una decisión sobre su renovación. La paciencia se agota en las oficinas de Valdebebas.